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| Escaparate del restaurante oriental situado en la Gran Vía. Foto: Héctor García. |
Frente a mí se encontraba un enorme acuario con varios ejemplares de galápagos norteamericanos pertenecientes a las subespecies Trachemys scripta elegans -de orejas rojas- y Trachemys scripta scripta -de orejas amarillas-. Entre ellos, destacaba un enorme ejemplar de falso galápago mapa -Graptemys pseudogeographica- y otros dos especímenes más pequeños.
Acerqué la mirada al cristal y allí dentro, como si tal cosa, había dos ejemplares adultos de galápago europeo (Emys orbicularis), una especie autóctona y protegida, cuya tenencia y captura está terminantemente prohibida por la ley. Una especie gravemente amenazada cuyos efectivos se ven disminuidos año tras año fruto de la destrucción de sus hábitats naturales y de la introducción de especies exóticas.
Allí quede perplejo, estupefacto. Junto a los niños que como yo se apoyaban en el cristal, ajenos a la situación. Jamás hubiera imaginado encontrarme galápagos europeos en un acuario privado, leprosos aún... ¡¿pero europeos?! ¿de dónde habían salido?... ¿cómo puede acabar una especie tan desconocida, escasa, esquiva y difícil de capturar en el acuario de un wok?... sigo preguntándomelo casi a diario.
Acerqué la mirada al cristal y allí dentro, como si tal cosa, había dos ejemplares adultos de galápago europeo (Emys orbicularis), una especie autóctona y protegida, cuya tenencia y captura está terminantemente prohibida por la ley. Una especie gravemente amenazada cuyos efectivos se ven disminuidos año tras año fruto de la destrucción de sus hábitats naturales y de la introducción de especies exóticas.
Allí quede perplejo, estupefacto. Junto a los niños que como yo se apoyaban en el cristal, ajenos a la situación. Jamás hubiera imaginado encontrarme galápagos europeos en un acuario privado, leprosos aún... ¡¿pero europeos?! ¿de dónde habían salido?... ¿cómo puede acabar una especie tan desconocida, escasa, esquiva y difícil de capturar en el acuario de un wok?... sigo preguntándomelo casi a diario.
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| Los dos ejemplares de galápago europeo (Emys orbicularis) que se encontraban en el acuario. Fotos: Héctor García |
Sinceramente, no me tembló el pulso a la hora de dar parte a las autoridades de semejante tropelía y durante la mañana del lunes 17 de octubre agentes medioambientales llevaron a cabo una inspección de los galápagos decomisando los dos ejemplares autóctonos y supongo que cursando la sanción pertinente. Desconozco cual ha sido la suerte de los galápagos, pero imagino que ingresaron en el centro de recuperación de fauna correspondiente, donde se les realizaría una evaluación de su estado y tras esta, se les asignaría un destino -liberación, permanencia en cautividad, cesión a instituciones apropiadas, etc-.
Por supuesto no cenamos allí, terminamos nuestro deambular devorando un enorme e indigesto "Dürüm" en el Kebab más cercano.
Por supuesto no cenamos allí, terminamos nuestro deambular devorando un enorme e indigesto "Dürüm" en el Kebab más cercano.
Herpetosaludos!
Desde luego, no se puede tolerar que especies protegidas se mantengan en cautividad. Pero el hecho de que se muestren en un escaparate nos dice que es por pura ignorancia y sin malas intenciones, lo que no se puede decir en todos los casos.
ResponderEliminarPero ante la ignorancia hay una gran responsabilidad por parte de las autoridades encargadas de velar por la conservación de la naturaleza. Cuando hay una nueva norma de tráfico ¿no nos lo publicitan para que estemos informados? Pues lo mismo debería hacerse con estas cuestiones.
Por ejemplo, ahora ha cambiado la legislación sobre tenencia de galápagos americanos y solo los más atentos (AHE y poco más) se han enterado del asunto. De aquí a un año habrá un montón de personas con tortuguitas ilegales que igual se asustan y deciden soltarlas en el río más próximo. Justamente lo que la lay pretende evitar.
Mientras tanto, blogs como este intentan hacer lo que los políticos no cumplen.
Gracias y saludos.
El mantener especies autóctonas en cautividad está más extendido de lo que parece, como bien apunta Jesús, la gente no es consciente (en algunos casos) de que está reteniendo a una especie protegida. En mi zona tengo muchos casos de gente que en la pesca de Procambarus clarkii suelen retener a los galápagos que salen en las masas en casa, en algunos casos en patios de hormigón y sin agua salvo un pequeño recipiente. Salvamos a ejemplares que Leproso con enormes abrasiones en las extremidades y ausencia de cola. Incluso en colegios, hemos visto juveniles de Europeo no se muy bien el fin de tenerlos en la clase, imagino que para que los niños lo cuidasen y se concienciasen...el mismo fin lo cumpliría perfectamente otra especie domestica y no una especie salvaje (digo yo) En fin,otro tema es el trafico de especies autóctonas en la red...si aparece una especie o subespecie nueva al momento hay gente que te la vende en internet...una vergüenza. Esperemos que la Ley no empeore la situación.
ResponderEliminarUn saludo
Abel